¡Sin duda el piercing orbital fue una de las tendencias más grandes del año pasado! En el día de hoy, desde L’Embruix queremos explicaros todo sobre el piercing orbital. Se trata de un piercing que se realiza en la oreja de una manera muy especial.
¿Quieres saber más sobre el piercing orbital? ¡Solamente hace falta que sigas leyendo!
¿Qué es el piercing orbital?
Se trata de un tipo de perforación que se realiza en el área de la oreja, como muchos otros tipos de piercing pero el piercing orbital en concreto, se realiza de un modo muy diferente a los demás.
La principal peculiaridad de este tipo de piercing es que envuelve otras dos perforaciones, que se conectan a través de un aro. Debido a que el aro forma una especie de órbita se le denomina de esa manera.
La zona más común donde se encuentra suele ser es la que se encuentra en forma de hélice en la oreja.
¿Cómo se realiza esta perforación?
Al igual que cualquier otro tipo de piercing, siempre se debe realizar en manos de un profesional, como L’Embruix. Nunca os vayáis a realizar una perforación de un estudio que no tenga buena reputación o que no cumplan con las medidas de higiene y seguridad establecidas para un estudio.
El piercing orbital requiere de dos perforaciones que se pueden realizar al mismo tiempo. Podrás escoger la localización dónde quieras los agujeros de la perforación y una vez estos se hayan realizado será el momento de colocar la joya que previamente se habrá escogido.
Debes de tener en cuenta de que se trata de un proceso de cicatrización bastante largo, alrededor de los 4 meses, y que no debes cambiar la joya hasta que este no se haya finalizado.
¿Qué cuidados debo tener?
Los cuidados que se deben de tener son bastantes similares a cualquier otro tipo de piercing. Deberás de tener en en cuenta evitar cualquier golpe en la zona o que este se enganche con la ropa.
De forma general, deberás de limpiar la zona muy bien ya sea con una solución salina o con un suero. Repitiendo así este paso durante 3 veces al día, a ambas perforaciones.
Deberás procurar lo siguiente:
- Deberás dormir en una posición en que las perforaciones no se encuentren en contacto con la almohada y que tampoco realizan ningún tipo de presión sobre ella.
- Nunca realices las curas con las manos sucias. No toques las perforaciones salvo para hacer las curas y siempre con las manos limpias o con unos guantes que sean estériles.
- Para poder secarlo después de la limpieza, usa siempre una toalla o un paño limpio. La zona se encontrará bastante sensible y deberás de secarla con toques pequeños, nunca frotes ya que causará una irritación.
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