El piercing medusa

La medusa es mucho más que un animal, es un piercing

No, cuando hablamos en esta web de medusa no nos estamos refiriendo al animal que te hace salir del agua de la playa porque es venenoso y te puede causar problemas en la piel, sino del piercing medusa, uno que es súper llamativo y que además queda muy bien, y que no todo el mundo conoce.

Pero para eso estamos nosotros aquí, para presentártelo.

Como ya sabes, los piercings se pueden hacer en varias partes del cuerpo, cada uno tiene su cosita, y este piercing medusa mola mucho.

El piercing Medusa se hace perforando el labio superior, en el surco nasolabial, es decir, en el hoyuelo que hay entre el labio superior y la nariz. Ese espacio es el también llamado filtrum. Y además, para mucha gente es muy sexy, da un toque erótico que a muchas personas les encanta.

Hay dos formas de llevar a cabo la perforación para colocar un piercing Medusa. La primera, es la vertical, que también se conoce como Jestrum, en la que colocamos una joya con una barra curva gracias a la que la joya también será visible por encima del labio superior, creando un efecto de simetría que queda genial.

La segunda forma de hacer un piercing Medusa es la doble, es decir, perforamos una segunda vez el interior del surco nasolabial de forma paralela al Medusa normal y en el que se puede poner una joya que sea igual que la primera pero de distinto tamaño.

Queda muy bien.

Tal vez te preguntes qué tipo de joya utilizar para el piercing Medusa. Bueno, generalmente se suele poner el labret, que es una barra con una pequeña bola al final de la misma, pero vamos, que hay un montón de variaciones que puedes encontrar. Te recomendamos que si tienes dudas, vengas a Lembruix y nos consultes.

Eso sí, lo mejor es que no utilices pendientes que sean de níquel o acero quirúrgico, y utiliza una joya con un tamaño adecuado, ni más grande, ni más pequeño.

 Lo mejor para hacerte este tipo de piercing es que vengas a Lembruix, pues somos expertos en perforaciones y lo haremos ofreciéndote todas las garantías, algo que es muy importante para tu seguridad, pues es un sitio delicado al perforar una parte en el labio superior y otra en la boca.

Al poco tiempo de hacértelo tendrás al comer unas molestias, pero no te preocupes, pues a los pocos días más se van pasando, y luego, en tu vida cotidiana, no te darás cuenta de que lo llevas puesto.

Si quieres conocer más detalles sobre el Medusa Piercing y te llama la atención pensar en cómo te quedaría a ti, ven a Lembruix y cuéntanos la idea que tienes, y nosotros te asesoraremos en el tipo de piercing que te vendría mejor, el tipo de material y el diseño de la joya que te puedes colocar en el labio y, por supuesto, de cómo son los cuidados que tienes que dar a tu piercing.