El piercing smiley

Prueba algo diferente: el piercing smiley

Sí, ya sabemos que hemos dicho ya que los piercings molan, pero es que es verdad, y seguro que nos das la razón.

 Se puede llevar un piercing por muchas razones y por muchos motivos diferentes, cada uno tiene el suyo: diferenciarse del resto, simplemente porque te gusta… La cuestión está, y en eso sí tenemos que hacer mucho hincapié, en que elijas el mejor sitio para hacerlo y que lo hagas con todas las garantías para que luego no te generen problemas.

Está claro, ¿a que sí?

De entre la grandísima variedad de piercings que te puedes hacer en muchas partes de tu cuerpo, hay algunos más conocidos y populares que otros (lengua, nariz…) y hoy os queremos hablar de un piercing que se hace en el frenillo de la encía superior, el piercing smiley.

Debe su nombre a que solamente es posible verlo cuando sonríes, por eso también se le llama el piercing de la sonrisa.

De cualquier forma, es algo diferente y que queda francamente bien.

La parte del cuerpo (de la boca) donde se coloca, como decimos, es en el frenillo superior, que es como una especie de membranilla que hay entre nuestro labio superior y la encía, justo en la parte central de la boca.

Antes de perforarte para colocarte este piercing tan molón, tendremos que asegurarnos de que tu frenillo tiene el tamaño adecuado, pues si es demasiado pequeño, no es buena idea colocarlo ahí, sino elegir otro lugar. Tampoco es buena idea que te lo hagas tú mismo en casa, puesto que es una zona muy sensible y es muy posible que si lo haces de forma casera, se te infecte y tengas verdaderos quebraderos de cabeza. Siempre recomendamos que acudas a un establecimiento como Lembruix, en el que hay profesionales expertos en la perforación.

Es muy posible que te preguntes si al estar en una zona tan delicada, la perforación del frenillo para colocarte el piercing smiley es dolorosa, y tenemos que decirte que no mucho. Solamente notarás una molestia leve cuando te coloques el piercing propiamente dicho, la joya o lo que te quieras poner.

Respecto al tipo de joya que te puedes poner, los materiales plásticos son geniales, ya que no son dañinos para las encías, no dañan los dientes y tampoco favorecen la aparición de bacterias.

Como cualquier otro tipo de piercing, es necesario tener en cuenta que tras hacértelo vas a necesitar adoptar una serie de medidas para que evitar que se te pueda infectar. La principal medida es tener siempre la boca perfectamente limpia, evitando que pueda haber bacterias que te dañen.

A la hora de limpiarte la boca, no uses cepillos eléctricos, sino los de toda la vida, para no dañarte con ellos.

Si tienes alguna duda, siempre puedes acudir a Lembruix, donde te podemos dar todas las pautas necesarias para que tu piercing smiley pueda cicatrizar lo mejor y más rápidamente posible, y, por supuesto, estaremos encantados de aconsejarte.